El restaurante principal de Amanera, Casa Grande, se encuentra sobre unos espectaculares acantilados a más de 18 metros de altura, entre montañas, la selva tropical y el mar. Fiel al nombre de Amanera, que combina la palabra en sánscrito para «paz» y el término taíno local para «agua», el restaurante interior y exterior se encuentra junto a tranquilas piscinas infinitas, aprovechando al máximo las amplias vistas del Atlántico. Los platos inspirados en la cocina local de la isla también reflejan el entorno oceánico que lo abarca todo. Se puede reservar un pabellón comedor independiente de Casa Grande para celebrar eventos privados y ocasiones íntimas.
Disfrute de un desayuno con los clásicos huevos Benedict o chilaquiles de pollo. Refrésquese con un almuerzo ligero junto a la piscina a base de pulpo o camarones a la parrilla. Por la noche, cene un tiradito de salmón y un pargo recién capturado. Sea cual sea la hora del día o de la noche, el diseño encalado de Casa Grande, abierto por los lados, forma un inconfundible telón de fondo isleño para la versión de Amanera de las mejores ofertas culinarias del Caribe, todas centradas en sabores frescos y orgánicos y alimentos finamente condimentados.
Los versátiles espacios de Casa Grande incluyen La Biblioteca, El Lado de la piscina y El Salón de puros, todos los cuales pueden reservarse para cenas privadas. El chef ejecutivo de Amanera puede elaborar menús personalizados y se pueden preparar degustaciones de vino para satisfacer los gustos individuales. Para obtener más información sobre las tradiciones isleñas y la cultura local de la República Dominicana, reserve El Salón de puros para ver demostraciones de cómo enrollar puros y degustaciones de ron.
Huéspedes del complejo
Huéspedes externos